Suma tu vida
Cada una desde donde está, con lo que es y lo que tiene. Puedes regalar tu tiempo, tus manos, tu oración o incluso tu propia vida. Porque el amparo nace de muchas semillas pequeñas que, juntas, transforman el mundo.
Tú también puedes ser parte. ¿Cómo quieres unirte?
Sé voluntaria
Un gesto tuyo puede encender la esperanza en otra vida.
Haz una donación
Tu ayuda nos permite llegar más lejos.
Reza por nosotras
Tu oración es un regalo que nos sostiene.
Conviértete en hermana
Si sientes que Dios te llama, queremos caminar contigo.
